Elohim Kabir,
Kaf
El nombre Kaf כviene de la palabra Koaj (potencial), que alude al poder y fuerza. Esta letra
es la número 11 del alfabeto hebreo y tiene como valor guemátrico el número 20. Si observamos la grafía de esta letra, veremos que es muy parecida a la Beth, solo que Kaf כ es redondeada (al colocarle el 0 después del 2, nos indica que también los
atributos de la Bet בestán presentes, pero en otro nivel). Si Beth ב alberga en su vientre (vasija) a Aleph א, Kaf כ alberga a la Yud י (la letra número 10). Todas las letras que tengan un solo 0
acompañándolas, nos hablan de atributos de Yud יdesarrollándose en su interior. Por ello, veremos tales atributos de Yud
presentes hasta que lleguemos a la Tzadi צ (letra 90). Como Kaf כes la letra que le sigue a la Yud י, esto nos indica que Kaf כes el sitio en donde esa fuerza habita y se desarrolla.
Sobre las correspondencias de las letras Tet ט, Yud י y Kaf כ, en cuanto a los senderos que ocupan en el Árbol de la Vida, así como las cartas del Tarot de Marsella que les son asignadas, existe divergencia entre los distintos autores de Kabalah hermética. Sin embargo, a todos nos une un fin común: llegar a los niveles más altos de evolución. Por eso, ante tal divergencia de opiniones, lo mejor es remitirse a la fuente, al origen de la Kabalah: el "Libro del Zohar". Su autor, Rabi Shimon Bar Yojai, llegó al nivel máximo de evolución (nivel 125), y, en este libro, están marcadas las huellas que dejaron sus pasos por este mundo. En esta obra se nos deja claro que el atributo de Kaf es la fuerza, lo cual analizaremos a continuación.
El Libro del Zohar dice: "Kaf כdescendió del trono del Creador y se presentó frente a Él, y, temblando, dijo: Creador, yo soy digna de convertirme en la base del mundo porque yo soy Kavod (Tu Grandeza)" […] "Y el Creador contestó: ¿Qué estás haciendo aquí? Yo no crearé al mundo contigo. Regresa a tu lugar, pues tú existes en la palabra Kelaya (exterminación) y en la palabra Kalah (novia)".
Lo primero que hay que saber, para entender el texto anterior, es que esta conversación entre el Creador y las letras, intenta explicarnos que el mundo de Briah (mundo de la creación), constituye la Inteligencia que busca ordenar la cadena del ADN metafísico, de modo que el hombre, al revelar la Luz de cada letra, alcance la meta final de la creación (la iluminación). Evidentemente, tal conversación no se produjo literalmente. Lo que el Zohar nos quiere explicar con todas estas metáforas, es el proceso de la creación, es decir, lo que sucedió en fracciones de milésimas de segundo, pero visto en “cámara lenta”. Es como si alguien nos relatara de la A a la Z el proceso de germinación, crecimiento y desarrollo de un árbol de manzanas. Nosotros sólo vemos la manzana (el fruto), pero el proceso interno que vive la naturaleza, que creó la primera semilla del àrbol y dio origen a esta especie frutal, lo desconocemos.
El trono del Creador se refiere al mundo de Briah, puesto que ya sabemos que las letras hebreas pertenecen al Partzuf de Binah, es decir, son el ADN de la Madre cósmica. Luego, el Zohar nos dice que “...Kaf se presentó frente al Creador y, temblando, dijo...” ¿Por qué esta referencia a que la Kaf estaba temblando? Temblar, en el Zohar, quiere decir estremecerse, y allí se nos explica que el descenso de la kaf כ se refiere a la caída del hombre, a la pérdida de la conexión directa con la Divinidad. La conexión entre el mundo de Atziluth y el mundo de Briah quedó interrumpida con el descenso de la kaf כ del mundo de Briah (esa es la caída), lo cual pone en riesgo a toda la creación. De allí que el Creador responde que ella no será utilizada, puesto que encabeza la palabra exterminación. Todo esto quiere decir que, por la caída del hombre, las fuerzas impuras (el egoísmo, la envidia, los celos, etc.) entraron a este mundo y se aferraron a nosotros. Un bebé, al momento de nacer, está caído, pierde la conexión con la Divinidad (de allí que se diga que nacemos con el pecado original).
Una de las enseñanzas secretas clave que está codificada en esta letra, es que tiene la particular potencia de estremecer (sacudir) nuestro cuerpo de energía, para hacer que esas fuerzas negativas, que tenemos aferradas desde el nacimiento, se despeguen de nosotros. Hay que entender que este desprendimiento de las fuerzas impuras de nuestro cuerpo de energía, es capital para poder acceder a todo lo que deseamos.
Por otro lado, la palabra Kalah (novia), se refiere a Maljut (nuestro mundo o nosotros). En este sentido, Dios se niega a crear el mundo con la Kaf כ porque, después de la caída, el hombre, en su ignorancia, no podía tener control de esta fuerza, ya que destruiría al mundo y a sí mismo. De allí que el Zohar nos enseña que, la mayoría de las veces, reaccionamos autodestructivamente ante las situaciones que la vida nos presenta.
Kaf
כ
significa "palma de la mano", dejándonos ver que ese es el sitio por donde emana su fuerza. La kipá judía (casquete) está inspirada en la forma-pensamiento de la kaf. Puesto que su
nombre también significa palma, la kipá se considera la palma de la mano de Dios que se posa sobre la coronilla del hombre para recibir todo el potencial de la
Kaf
כsuperior.
Por eso, este gorrito (kipá) no es sólo para protegerse de recibir la Luz directa de Dios, sino que representa, además, un acto de humildad y de subyugación ante el
Creador.
Por otra parte, la palabra Keph (roca) tiene como raíz la Kaf כ, que representa la fuerza y la estabilidad. De allí que la carta del Tarot de Marsella que le corresponde es La fuerza. En ésta, vemos a una mujer y a un león domado por ella. Para explicar esta carta, relataré una experiencia personal: un día, meditando con esta letra, tuve la visión de un león muy grande y furioso que se paró frente a mí, pero en cuanto se acercó, esta fiera salvaje suavizó su gesto (seguía siendo grande y fuerte pero con actitud de cachorrito juguetón), y con su gran lengua me lamió la cara. Esta experiencia fue tan real que sentí la humedad en mi rostro, lo cual me permitió comprender que esta fuerza es tan descomunal que tiene el poder de materializarse. Con esta visión, aprehendí que esta fuerza es domada sólo cuando es utilizada para el servicio de los otros. Recordemos que la fuerza de la que hablamos es la misma que pone en movimiento la rueda de la fortuna (la Yud י que se gesta en su interior). Esta carta nos quiere mostrar que, cada vez que actuamos en detrimento del otro, estas fuerzas impuras, aferradas a nuestro ego, se convierten en autodestructivas.
No le hacemos tanto daño al otro (cuando lo criticamos, humillamos o buscamos su desmejora), como nos lo hacemos a nosotros mismos. Si bien vivir en una “burbuja egoísta” es nuestro método convencional de vida, estamos obligados a aprender una nueva manera de coexistir en este mundo. Este león es una fuerza que se vuelve contra nosotros cuando actuamos con miedo y en forma egoísta. Recordemos que Guevurá (llamada también rigor y fuerza), es la esfera por donde fluyen las Leyes que mantienen el orden y la justicia en la creación. Por lo tanto, aun cuando no lo entiendas y no lo veas, toda la creación mantiene un riguroso orden, y este instinto de depredación que tenemos, provoca la activación de estas Leyes para proteger al resto de la creación de nuestros instintos destructivos. ¿Te parece que exagero? Pues fíjate que guardar rencor contra tus padres, o vengarte de tu ex que te dejó por otra, o hablar mal de un compañero de trabajo para caer en gracia con tu superior, etc., son ejemplos de situaciones en las cuales esa fuerza se tornará en contra nuestra (eso es lo que provoca que vivamos en el dolor). La clave para confrontar cada situación que vivimos, es darle un voto de confianza a la Divinidad. Todo lo que pasa es perfecto, y, aun cuando no lo entendamos, hay detrás un bien oculto. Sufrir por lo que no podemos controlar es inútil y autodestructivo; “soltar” y vivir confiando en la vida es lo que esta letra nos quiere enseñar.
Al meditar con esta letra, obtenemos la fuerza de voluntad y autodominio. Además, nos otorga la capacidad de autobservación sobre nuestras limitaciones y defectos. Cuando manifestamos violencia (interna o externa), la kaf כ está bloqueada. La crueldad, debilidad y flojera exagerada, también nos muestran ausencia del fluido de kaf כ.
Kaf se ocupa de balancear la energía entre Guevurá y Jésed, lo cual permite que Tiféret se exprese. Este balance nos otorga el equilibrio de nuestras emociones. Además, el Zohar dice que Kaf representa a Maljút en la palabra Mélej (^lm), y si fue escogida para constituir esta palabra, es porque representa una boca abierta. El Árbol de la Vida está representado completamente en la cara, y la boca representa a Maljút. Por eso, es por el verbo que podemos materializar la energía metafísica.
Las letras hebreas son el fluido de la creación en actividad constante; mientras mantengamos sus lecciones de vida presentes, entraremos en sintonía con el ritmo cósmico. El método de hacerlo es a través de los ejercicios que aquí te brindamos y de la concientización de sus atributos. Este es un trabajo de todos los días, de cada vez que sales a la calle a tus actividades cotidianas. Las letras pretenden enseñarte a vivir en armonía con el entorno; por ello, te invitamos a ser un instrumento de las fuerzas puras de la creación y no de las fuerzas impuras, debido a que éstas nos provocan inmenso sufrimiento y grandes carencias.
Finalmente, te brindamos la siguiente imagen. Te ayudará al momento de realizar la meditación que encontrarás en el audio que te ofrecemos para que actives al Elohim Kabir en tu mundo interior.
Un abrazo...
Meditación práctica
Primeramente, se recomienda dibujar la letra (usa la imagen que está en el inicio, en blanco y negro). Luego, observarla de 3 a 5 minutos, cerrar los ojos y visualizarla frente al tercer ojo. Seguidamente, se lleva la letra a la glándula pineal (en el centro de nuestro cerebro). Por último, se visualiza en el cerebelo (ubicado en la base de nuestra cabeza, en donde se conecta la columna con el cerebro). Para mayor claridad, observa la siguiente imagen, donde está señalada la ubicación de la glándula pineal y el cerebelo en nuestro cerebro.
La anterior instrucción también puedes escucharla en el audio (formato mp3) que te brindamos seguidamente. Recuerda que estas instrucciones son generales, y, por tanto, debes seguirlas para cuando inicies la meditación con cualquiera de las letras hebreas.
Una vez que hayas realizado la práctica anterior de visualización, escucha
la siguiente meditación, que está construida para que te conectes, de forma específica, con el Elohim Kabir, Kaf.
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lola (martes, 04 junio 2019 02:50)
No encuentro el resto de las letras del alfabeto
Ziomara Lorenzini (domingo, 12 julio 2020 22:01)
Muchas gracias por compartir este conocimiento ha sido de mucha ayuda.
Pilar Delgado (sábado, 15 agosto 2020 05:37)
Shalom me parece muy interesante lo que publican. Puedo seguir leyendo sus artículos. Gracias
Yetzi (sábado, 10 abril 2021 14:31)
Hermosa meditación, me encantó la página y la enseñanza de esta letra. Gracias, gracias, gracias.
Carmen Lozada (sábado, 26 junio 2021 16:34)
Gracias
Arlex (miércoles, 19 julio 2023 23:23)
GRACIAS! Muchas bendiciones para todos.
Alicia (martes, 13 agosto 2024 06:35)
Shalom, muchas gracias � hermosa meditación y valiosísima instrucción.
Luz para tí y para todos